El capítulo más doloroso de la historia del Perú, se encuentra en sus inicios. Es en el año 1820, donde con la llegada de Bernardo Monteagudo, un espía argentino mandado por San Martín para una campaña de independencia. La primera impresión que tuvo Monteagudo del Perú fue que era un país que no tenía líderes políticos ni clases dirigentes y que los pobladores no se oponían a los dirigentes, que eran españoles, demostrándole así a San Martín , que el Perú era el peor país para independizar.
Un año después llega San Martín con un ejército de argentinos y chilenos a Lima y proclama la independencia en cuatro plazas sin que nadie se inmute. A pesar de ello, fue recién en 1824 que se organizó el Perú, tal y como lo conocemos, y en 1871, que se fundo por primera vez un partido político en el Perú: el partido civilista.
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